Cuando empecé con la fotografía, hace 10 años, sacaba fotos a todo. Creía, como muchos, que la fotografía es una manera de representar la realidad tal cual es.
Con el tiempo, y con varios miles de fotos acumuladas, descubrí patrones en las fotos que me gustaban: en muchas de ellas había personas, ya sea como protagonistas o como elementos diminutos en el entorno.
La fotografía de paisajes muchas veces busca retratar paisajes prístinos, vírgenes e inalterados. Y, por supuesto, sin personas.
Lugares así, donde uno pueda ir y no encontrar humanos al rededor apenas si quedan en la Tierra.
La sustentabilidad está ligada al modo en el que transitamos por nuestros lugares cotidianos, y no al hecho de que no los usemos.
Somos parte del paisaje, y con nuestras actividades lo destruimos y construimos continuamente. Eso es lo que intento mostrar en mis imágenes.